Cada vez más gente se decanta por usar un buen proyector en casa antes que una televisión de alta definición. ¿Porqué? Pues porqué casi por el mismo precio puedes tener una zona de visualización de tus películas, series y juegos preferidos con más del doble de pulgadas y con la misma calidad que un televisor de alta definición. Vemos un caso práctico.
Pongamos que dispones de un comedor con una distancia entre el sofá y la tele de unos 3 metros. Normalmente la gente suele comprar televisores de unas 42 a 50 pulgadas Full HD 1080p para el salón, y pongamos que además dispone de tecnología 3D para visualización con gafas. Más o menos un televisor así te puede costar alrededor de 700 euros. Ahora bien, si colocamos un proyector a la misma distancia (3 metros) y lo enfocamos a una pared blanca o directamente a una pantalla de proyector (la típica cortinilla que se baja), podemos llegar a obtener una resolución de 100 pulgadas en Full HD 1080p y también con capacidad 3D, todo ello por casi el mismo precio que un televisor HD, por unos 750 euros si buscamos bien.
La verdad es que cada vez más gente descubre las últimas novedades en proyectores y se plantea comprar un proyector y olvidarse de las engorrosas televisiones, que aunque son finas y delgadas ocupan un espacio considerable, en cambio con un proyector lo instalas en techo o sobre un soporte adecuado, le conectas la consola, el reproductor de dvd o blu-ray y un decodificador de TDT HD, y lo proyectas todo sobre la pared o sobre una pantalla de proyector. Más cómodo y práctico que cualquier otro sistema.
Información Bitacoras.com
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